10 tendencias en Capital Humano
En un contexto en el cual en mayor o menor medida todas las empresas están avanzando en su proceso de transformación digital, un informe reciente elaborado por la consultora Deloitte señala que las organizaciones deben adaptarse a los cambios tecnológicos sin olvidar el empoderamiento de sus empleados. Esto es posible mediante acciones concretas que beneficien a los colaboradores.
La investigación, llamada “Tendencias en capital humano”, sugiere que las compañías deben reinventarse con un enfoque humano, y en este sentido el rol del área de Capital humano es clave. Para llegar a semejante afirmación, la consultora entrevistó a 10 mil trabajadores de 119 países. Tras esa conclusión, algunas de las tendencias reveladas en el documento son las siguientes:
- Crece la fuerza laboral alternativa. El trabajo por cuenta propia viene creciendo y hay muy buenos profesionales que se desempeñan bajo esta modalidad. Por este motivo, las empresas deberían crear mejores prácticas y plataformas para emplear a los trabajadores freelance.
- El nacimiento de los "supertrabajos". Las organizaciones deben rediseñar y crear roles que combinen características tradicionales y, al mismo tiempo, aprovechen la productividad y eficiencia que brindan las innovaciones tecnológicas.
- Liderazgo con habilidades tradicionales y del siglo XXI. Se requieren líderes con habilidades comerciales tradicionales que se adapten a continuos cambios, que puedan aceptar la ambigüedad y la incertidumbre, además, que entiendan y administren tecnologías digitales, cognitivas y basadas en inteligencia artificial.
- Una experiencia laboral más humana. Los empleadores deben ser capaces de comprender las aspiraciones de los trabajadores y, por otro lado, conectar el trabajo de los empleados con el impacto que tiene en la organización y en la sociedad.
- Rendimiento organizacional basado en la colaboración. Las organizaciones deben actualizar el liderazgo, el diseño del trabajo y las recompensas para abordar los retos actuales. Esto demanda una nueva forma de organizar a la compañía.
- Recompensas laborales más justas. Para motivar a su gente, las organizaciones deben desarrollar recompensas que respondan a las expectativas y necesidades de los trabajadores. Es necesaria una mejor comunicación y relación con los empleados.
- Reclutamiento con tecnología. Las organizaciones deben reconsiderar cómo acceder al talento movilizando recursos internos, encontrando personas en la fuerza laboral alternativa y aprovechando la tecnología para aumentar la productividad del reclutamiento.
- Aprendizaje a lo largo de la vida. La evolución de los trabajos exige nuevas habilidades. El aprendizaje se está convirtiendo en una actividad permanente integrada con el trabajo. Las empresas requieren una cultura que incentive el aprendizaje continuo y un enfoque en ayudar a las personas a identificar y desarrollar nuevas habilidades.
- Actualizar el talento de las empresas. Las organizaciones deben ofrecer a sus trabajadores oportunidades de crecimiento a todos los niveles, no solo gerentes y líderes de equipo. La tecnología debe facilitar la movilidad de empleados entre funciones, trabajos y proyectos, así como desplazamientos de manera geográfica.
- Tecnología de recursos humanos enriquecida. Las empresas deben repensar su estrategia de tecnología de recursos humanos, considerando servicios en la nube, pero explorando nuevas plataformas innovadoras, automatización y herramientas basadas en inteligencia artificial para complementar sus sistemas.
Expertos de Deloitte afirman que antes de pensar en cualquier meta financiera, las organizaciones necesitan preparar a sus empleados a través del aprendizaje continuo y comenzar a trabajar en un entorno con prácticas de liderazgo efectivas y flexibles.