El desafío de trabajar hoy mismo como si se tratase del trabajo del futuro

Así las cosas, un estudio de McKinsey sugiere que los trabajadores calificados serán cada vez más escasos. De ahí que muchas firmas estén invirtiendo en capacitar a su personal para que adquieran las destrezas propias del contexto actual que implica, antes que nada, entender cómo se hacen negocio en la era digital y cómo llegar a los posibles consumidores y retener a los actuales a través de distintas estrategias de marketing digital, entre otros conocimientos.

Según la consultora, “Las empresas que no se adopten ni aborde sus necesidades vinculadas con el talento subyacentes no podrá estar a la altura del mercado actual. Asimismo, los gerentes podrían perder oportunidades de trabajar en colaboración con los empleados para crear un futuro próspero y satisfactorio para todas las partes interesadas: las comunidades donde opera la empresa, su fuerza laboral y la sociedad en general”.

Por qué los empleadores deberían liderar el camino

El ritmo y la escala de la interrupción tecnológica, con sus riesgos de desempleo y la creciente desigualdad de ingresos, son tanto un desafío social y político como empresarial. No obstante, los empleadores están mejor posicionados para estar a la vanguardia del cambio y tener un impacto social positivo, por ejemplo, al mejorar las capacidades de sus empleados y equiparlos con nuevas habilidades. Y las propias compañías pueden obtener el mayor beneficio si logran transformar con éxito la fuerza laboral de esta manera.

“Muchas empresas líderes se están dando cuenta de que no pueden contratar a personas todas las nuevas habilidades que necesitan. La mejor solución es mirar internamente y desarrollar el talento que ya tienen, ya que este enfoque a menudo no solo es más rápido y financieramente más prudente, sino que también es bueno para la moral y el atractivo a largo plazo de la empresa para los posibles reclutas”, indica McKinsey en este informe.

Hay muchísimos estudios nacionales e internacionales en los cuales los ejecutivos encuestados afirman que los líderes ven el talento como la barrera más grande para la implementación exitosa de nuevas estrategias, en particular, aquellas impulsadas por la digitalización y la automatización.  La buena noticia es que, al tomar medidas concretas ahora para construir una infraestructura que respalde el futuro del trabajo, las empresas pueden prepararse para el éxito en esta nueva era competitiva.