Conoce las cinco características principales de este tipo de microempresa y tres consejos clave para crear el tuyo.

En este artículo te contamos qué es un microemprendimiento y cuáles sus características, con el objetivo de que evalúes si este modelo de negocios se ajusta al proyecto que quieres desarrollar.

Qué es un microemprendimiento

Llamamos microemprendimiento a las empresas unipersonales (integradas por una persona) aunque, en algunos casos, se unen varios emprendedores para concretar dicho negocio.

La principal motivación que impulsa a las personas a crear estas microempresas está relacionada con la intención de distanciarse de sus trabajos en relación de dependencia, pero no cuentan con suficiente financiamiento para formar una PyME (Pequeña y Mediana Empresa).

Pese a los riesgos que implica crear un microemprendimiento en el contexto actual, en Argentina, de acuerdo a una encuesta global de Santander, el 82% de los estudiantes y emprendedores universitarios están dispuestos a arriesgarse a iniciar sus propios negocios.

Asimismo, la consultora OnePoll concluyó que “tres de cada cuatro menores de 40 años, en la Argentina y en el mundo, sueñan con ser emprendedores o ya lo lograron, al considerar como ventajas comparativas ser mejores para adaptarse a las nuevas tecnologías y tener ideas más creativas e innovadoras que otras generaciones”.

A partir de estos datos, es probable que estés leyendo este artículo con la idea de crear tu propio emprendimiento. Si es el caso, te invitamos a conocer qué caracteriza a las microempresas.

5 características de los microemprendimientos

Ahora que ya conocemos el concepto y algunos datos clave de su importancia, vamos a repasar las principales características de los microemprendimientos:

1. Tienen pocos miembros. Tal como mencionamos previamente, este tipo de empresa está formada por una persona o pocos socios.

2. No cuentan con empleados. Lo más común es que los mismos fundadores realicen todas las tareas del microemprendimiento y, si requieren algún servicio específico, prefieren la tercerización temporal.

3. El riesgo económico es bajo. Debido al tamaño de la empresa, es común que la inversión inicial y el costo operativo sean muy bajos; por esta razón, si el emprendimiento fracasa, la pérdida de recursos no será tan significativa. No obstante, es importante hacer un plan de negocios para evitar que esto suceda.

4. La expertise de los fundadores es la base del microemprendimiento. Al ser una empresa con recursos limitados, las habilidades y conocimientos de los socios son la esencia del negocio.

Si, por ejemplo, se trata de una tienda de artesanías, la capacidad creativa del emprendedor es fundamental y, es probable, que amplíe su área de conocimiento a otras ramas como marketing digital o finanzas para potenciar su negocio. Se trata, pues, de perfiles multifacéticos.

5. La relación emprendedor - cliente es más estrecha. Una de las características típicas de estas microempresas  es el vínculo estrecho que se crea entre los fundadores y los consumidores, pues el servicio que prestan suele ser más personalizado.

3 consejos clave para los microemprendedores

Si bien no hay recetas infalibles para lograr el éxito de un negocio, estos consejos que te compartimos a continuación te van a ayudar a empezar con buen pie:

1. Aprovechar las ventajas de las herramientas digitales. En este punto, te recomendamos crear una página web de ventas. Es más económico que invertir en una tienda física y vas a tener más alcance, pues con un negocio virtual puedes vender a cualquier parte del país y del mundo.

2. Usar las redes sociales. Vinculado al punto anterior, si tu público objetivo está en Instagram, Facebook, YouTube o Tik Tok, crea el perfil de tu marca en cada una y genera contenido de calidad. Las redes sociales son excelentes canales de comunicación, publicidades de producto y venta.

3. Lanzar un plan piloto. Gracias a la flexibilidad horaria que trae consigo la creación de un microemprendimiento, muchas personas comienzan su empresa a la par de sus trabajos en relación de dependencia. Si esta es una opción para ti, arma un plan piloto y, a medida que crezca la demanda, vas a poder dedicarte 100% a tu proyecto. La palabra clave en este punto es organización: establece horarios y prioridades para distribuir tus tareas.

¡Anímate a crear tu microemprendimiento y muéstrale al mundo lo que eres capaz de hacer!